La Euroliga es la competición de baloncesto más prestigiosa de Europa. Sin embargo, durante muchos años su comunicación había sido errática; la marca no había encontrado un código propio, que la representara y pusiera en valor toda su entidad.

Por ello, necesitábamos encontrar un estilo y una voz propios que ayudaran a transmitir la competitividad y la emoción de la Euroliga y que generaran expectación y fueran relevantes para sus fans en todo el mundo.

Cada año, los mejores dieciocho equipos de baloncesto de Europa luchan por ganar la Euroliga; algo que solo puede lograr uno de ellos, y no por mucho tiempo, porque cada temporada el desafío vuelve a empezar, y cada año es más retador.

Para trasladar esta idea, nos inspiramos en un mito: el de Sísifo. Un símbolo universal del sacrificio que implica la búsqueda constante de una nueva meta. Así, bajo el lema “Every game matters”, trabajamos una pieza en la que cuatro de los más destacados jugadores de la EuroLiga (Cory Higgins, Nicolo Melli, Vasilije Micic y Tornike Shengelia) iniciaban una carrera infinita hacia la cima como alegoría de una competición que no tiene techo y en la que cada tapón, cada jugada y cada hora de entrenamiento cuenta.

Todo ello con un estilo de realización urbano y actual, combinando imágenes reales de juego con escenas de entrenamiento y metáforas visuales acerca del esfuerzo, los dilemas tácticos y la superación de las dificultades.

Las campañas, activas en televisión y medios digitales, fueron traducidas a 6 idiomas y llegaron a decenas de países, entre los que se encuentran Francia, Italia, Alemania, España, EE.UU., Israel y Turquía.

Los seguidores de la competición valoraron muy positivamente la nueva comunicación de la marca, que logró conectar y generar expectación entre las distintas audiencias.